Tres palabras

“Qué te inspira el mar en tres palabras”, preguntaste. Y me pillaste desprevenida porque yo estaba pensando en otra cosa, en algo inadecuado que no quise reconocerte. Y callé. Porque tampoco sabia qué decir, incapaz de concentrarme. Porque el mar es tanto que no se pueden decir solo tres palabras así, aquí te pillo aquí te mato. Y anoche lo estuve meditando, en la cama, agotada. Si hablamos del mar que contiene al horizonte, el que se confunde con el cielo que abarca mucho mas allá de lo que alcanza la vista y que lleva lejos nuestras risas, me inspira libertad, aventura y coraje. Pero si pienso en el mar que acaricia la arena y con paciencia esculpe las rocas, el que con el tiempo dibuja la costa, el que juega con los niños y hace cosquillas en el alma y en los pies desnudos, me inspira pasión, ternura y tesón.Como puedes ver no tengo nada claro cual es mi postura frente al amor, pero recordando tus tres palabras, no tiene nada que ver con la tuya.